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Antonplatz
© tic / Friedel Kantaut

Antonplatz

La avenida Berliner Allee es la arteria principal del barrio Weißensee. Comienza en la plaza Antonplatz, donde se encuentra uno de los cines más antiguos de Berlín.

En 1804 comenzó la ampliación de la avenida Berliner Allee. La plaza Antonplatz se construyó en 1871 y fue reconocida oficialmente como plaza pública en 1875. La línea de tranvía de la avenida Berliner Allee es la más antigua que se conserva por completo en la ciudad y que todavía se sigue utilizando. Ya en 1877 circulaba por aquí un tranvía tirado por caballos que iba desde Alexanderplatz hasta el lago Weißen See.
 
La plaza Antonplatz recibió este nombre en honor a Anton Matthias Schön (1873-1913), terrateniente y político municipal pruso. Era el representante berlinés y el hermano pequeño de Gustav Adolf Schön (1834-1889), naviero y especulador hamburgués que en 1872 compró gran parte del terreno de Weißensee, lo loteó hasta 1874 y después lo vendió, obteniendo así grandes beneficios.
 
La plaza Antonplatz la compró en 1875 el municipio de Weißensee, que todavía no pertenecía a Berlín. En la plaza se construyeron hoteles, bancos y unos grandes almacenes. En 1897, con motivo del centenario del nacimiento de Guillermo I (emperador de Alemania entre 1871 y 1888), se erigió un monumento al emperador en esta plaza. Por esta razón, en los planos de principios del siglo XX también se le daba a la plaza Antonplatz el nombre no oficial de Kaiser-Wilhelm-Platz (plaza del emperador Guillermo). La estatua se cambió de lugar en 1928 y fue fundida durante la Segunda Guerra Mundial. Su apariencia actual data del año 2001.
 
De 1907 a la década de 1920, la avenida Berliner Allee fue la calle de los cines. Los primeros cines o, como los berlineses decían, los “Kintopps”, se encontraban con frecuencia en locales comerciales reformados. El cine de la ajetreada plaza Antonplatz fue el primer edificio dedicado exclusivamente a un cine en Weißensee. Se construyó en 1919 según los planos de los arquitectos berlineses Max Bischoff y Fritz Wilms. Durante la Segunda Guerra Mundial resultó dañado y se volvió a abrir en 1948. En 1979, el departamento de edificación de la ciudad cerró el que en aquel momento era el único cine privado de Berlín Oriental. El arrendatario privado renunció al cine, por lo que el ayuntamiento de Berlín Oriental se hizo cargo de él. Tras una rehabilitación en profundidad, el cine “Kino Toni” volvió a abrir sus puertas en 1982. Actualmente vuelve a estar en manos privadas.
 
Desde octubre de 2008, la parte sur de la plaza, que estaba en reformas, vuelve a ser transitable. El terreno, de 3700 m², se caracteriza por su amplitud de vistas. Motivos de madera delimitan discretamente el pequeño parque que sirve como separación del tráfico de la avenida Berliner Allee y como lugar donde sentarse. En el centro de este lugar de descanso y ocio se encuentra una tranquila fuente de granito de quince metros de largo, obra del escultor berlinés Matthias Heinz.